Skype Translator abre un abanico de posibilidades para que las personas en todo el mundo puedan conectarse y comunicarse salvando la barrera idiomática. Además, el sistema se basa en el aprendizaje, es decir, la propia tecnología mejora con su uso consiguiendo cada vez mejores traducciones. De momento la compañía ha comenzado con dos idiomas hablados por millones de personas, el inglés y el castellano. Sin embargo su objetivo a largo plazo «es traducir tantos idiomas y plataformas como sea posible ampliando con ello la experiencia de Skype Translator de manera individual para cada uno de los 300 millones de usuarios conectados» apuntan desde la compañía.
Para el propio Gurdeep Pall, «Skype Translator es un gran ejemplo de los beneficios de la inversión de Microsoft en la investigación. Hemos invertido en el reconocimiento de voz, tecnologías de traducción y aprendizaje de máquinas automáticas durante más de una década, y ahora están emergiendo como importantes componentes en esta era de la computación más personal. Skype Translator es el ejemplo más reciente y visible».
Se trata de una primera versión preliminar y no todos los ordenadores soportan el sistema. Para que funcione, la tecnología necesita un dispositivo con el sistema operativo Windows 8.1 y de hecho, esta innovación ha sido posible gracias a la colaboración de Skype con Microsoft Research.